miércoles, 28 de marzo de 2012

PADRES, HIJOS Y DEPORTE


A partir del video publicado por Gerard Artigas en su Blog (http://gerardartigas.blogspot.it/2012/03/pares-o-hooligans-violents.html) se me ocurrió escribir unas líneas acerca de los padres con sus hijos en el deporte. A veces, sin darse cuenta, pueden generan presiones y malestar a los menores en la práctica deportiva.

En un artículo anterior veíamos cuán importante puede ser el deporte en el desarrollo de un niño. Como podemos, por medio del mismo, enseñar valores,  ayudarlos a socializar, a formar la personalidad; mejorar física, psíquica, intelectualmente.  (http://misterdalessandro.blogspot.com/2012/02/conozcan-lequip-petit.html).

Lamentablemente en muchos casos nos encontramos con que hay padres que no entienden que en edades tempranas el niño debe jugar para divertirse y cree que su hijo sea la futura estrella en el deporte (sobre todo desde que las estrellas deportivas ganan tanto dinero!!!)
Esto puede generar en los niños ansiedad y cierta presión psicológica que en algunos casos hasta puede desembocar en el abandono del deporte. Existen estudios donde hacen referencia  a que una buena parte del 80% de los jóvenes de 13 años que abandonan la práctica deportiva lo hace por no soportar la presión de los padres o el entrenador.

Como educadores debemos ayudar a que los padres comprendan que a temprana edad debemos proporcionar el mejor ambiente posible para que, a través del juego organizado, los chicos se diviertan y aprendan no solo las habilidades técnicas coordinativas, sino más que nada habilidades sociales (como relacionamiento con sus pares) y valores (honestidad, respeto, juego limpio, solidaridad, no violencia).

Para que ello ocurra se necesita de la colaboración de todos los agentes presentes en el proceso: jugadores, árbitros, directivos y, por sobre todo, entrenadores y padres que son quienes sirven de ejemplo más fuerte para los chicos.

Me gustaría señalar algunas actitudes que suelen ser fuente de estrés y de agresividad en los niños deportistas: por ejemplo los adultos que gritan a sus hijos exigiendo de hacer las cosas de tal o cual manera; o que dan indicaciones al equipo como si fueran los entrenadores (y no solo no lo son, sino que indican cosas distintas a las que sugiere el entrenador). También lo hacen quienes protestan todo el tiempo contra el árbitro y los rivales (olvidando que son niños), los violentos que incitan y dan malos ejemplos de deportividad.

Sin dudas no todos, ni siquiera la mayoría, son así. Existen hermosos ejemplos de padres que hacen de la experiencia deportiva una experiencia rica y gratificante. Son aquellos que alientan a sus hijos y compañeros de manera educada y elegante siempre aportando motivación y más que nada seguridad, disfrutando de ver a sus hijos practicando un deporte.


Algunas pautas de comportamiento para padres que quieren ayudar a sus hijos a disfrutar del deporte:

  • Animar a los niños a participar, sin forzarlos.
  • Deje que los niños jueguen y aprendan con la práctica, limite las instrucciones constantes.
  • Focalizarse en el esfuerzo, el desempeño y no en la victoria o la derrota.
  • Anime a los niños a jugar respetando las reglas y con espíritu deportivo.
  • No ridiculizar o gritarle a un niño o su equipo por haber cometido un error o haber sido derrotado.
  • Todos los jóvenes merecen  atención y oportunidades.
  • Recuerde que los niños aprenden más y mejor mediante el ejemplo. Aprecie el  buen desempeño y las buenas jugadas de todos los participantes.
  • Animar inteligentemente; sin gritos, con calma y siempre positivamente.
  • Respetar las decisiones del árbitro y enseñar a los niños a hacer lo mismo.

Extraído de “Small-Sided Games. Parent information guide.”

Espero sirva de ayuda, a la próxima…